En esta época de las telecomunicaciones y las redes sociales, los derechos a la intimidad y privacidad muchas veces se ponen en entredicho. Hay ejemplos claros como son la venta de datos de perfiles de Facebook a multinacionales con fines comerciales, además de que las fotos que se cuelguen en dicha red social o en otras como Tuenti pasan a estar también bajo propiedad de los dueños de la página web.
Sin embargo, esto parece un juego de niños si lo comparemos con un sistema de control y filtrado de la información que opera desde hace décadas y que es un gran desconocido para la ciudadanía. Se trata de la Red Echelon. Una red espía creada por varios países (EEUU, Reino Unido, Canadá, Nueva Zelanda y Australia) en plena Guerra Fría con la finalidad de interceptar mensajes soviéticos a través fax, teléfono, telégrafo… Dicha red permitía filtrar e interceptar mensajes que contuvieran determinadas palabras clave, nombres, direcciones e incluso voces.
La cuestión es que una vez finalizada la Guerra Fría tras la caída del bloque soviético, los países capitalistas decidieron mantener la Red Echelon con la excusa de que podría ser una forma de garantizar la seguridad ante grupos terroristas. De esta forma, hoy día Echelon sigue operando y ha sido actualizada para interceptar mensajes generados a través de las nuevas tecnologías: teléfonos móviles, videoconferencias e Internet. Y todo ello al margen de regulación judicial. Incluso la Unión Europea, en Septiembre de 2001, una semana antes de los atentados de las Torres Gemelas, había hecho una histórica resolución reconociendo la existencia de Echelon y su ilegalidad. El atentado de Nueva York, hizo que rápidamente se olvidara la existencia de Echelon...
Y cabe decir que no sólo se utiliza en la lucha contra el terrorismo, sino que tiene aplicación en todos los ámbitos de la vida social, política y económica, como demuestra el hecho de las intercepciones y grabaciones de conversaciones personales, políticas y hasta de espionaje industrial. Hay numerosos casos conocidos a través de las escuchas y grabaciones de Echelon: desde el Caso Watergate hasta el caso "Super López", el ingeniero español que trabajando para General Motors vendía información a Volkswagen. Pasando por multitud de casos y affairs amorosos y de infidelidades que saltan a la luz tras grabaciones, escuchas telefónicas e intercepción de correos electrónicos que acaban con la carrera política o militar de altos cargos, como el actual Caso Petraeus). Todo grabado por Echelon... sin ser cuestiones de lucha contra el terrorismo.
Aquí, en España, tenemos SITEL (Sistema Integrado de Interceptación de Telecomunicaciones) un sistema creado durante el Gobierno de Aznar en 2001, que permite al Centro Nacional de Inteligencia (CNI, "la CIA española") interceptar y analizar cualquier tipo de comunicaciones digitales (llamadas telefónicas de fijos y móviles, mensajes de texto e imagen, localización geográfica en el caso de móviles, etc.). No consta, pero es probable, que el sistema tenga capacidad de interceptar comunicaciones de Internet. El sistema fue creado por Ericsson a petición de José María Aznar y el contrato de compra fue firmado por nada más y nada menos que por el entonces Ministro del Interior, un tal Mariano Rajoy. Durante el Gobierno de Zapatero, el Ministerio de Interior (a cargo de un tal Alfredo Pérez Rubalcaba) concedió a la empresa Fujitsu la gestión de la central de SITEL y puso en funcionamiento la maquinaria, algo que al parecer no había llegado a hacer el Gobierno de Aznar (o eso dicen desde el PP).
SITEL es un gran desconocido para los españoles, pero es un arma de control al más puro estilo Orwelliano. Hace un par de años, cuando se destapó todo el tema de las escuchas de la trama Gürtell y el supuesto espionaje a líderes del PP, salió a la luz el tema de SITEL, aunque apenas trascendió a la opinión pública. Entre los dos crearon y dieron cuerpo a SITEL, pero les avergüenza reconocer que no sólo se usa contra el terrorismo. Hasta Rubalcaba llegó a pedir al PP quejara el tema de las escuchas de SITEL para que "los malos no aprovechen la supuesta ilegalidad de SITEL" refiriéndose a Batasuna.
El Gran Hermano nos vigila. A parte de los links que he ido dejando por el post, aquí dejo estas otras referencias para mayor información.