miércoles, 7 de abril de 2010

IMPUNIDAD FASCISTA Y RELACIÓN IGLESIA-ESTADO

Leo la noticia de que en la iglesia de los Jerónimos de Madrid se ha realizado una misa para celebrar la victoria franquista contra "los enemigos de Dios", coincidiendo con el 71 aniversario del fin de la Guerra Civil, desatada por el Golpe de Estado del General Francisco Franco contra la legalidad Republicana.

A dicha misa, oficiada por el párroco de la citada iglesia, Julián Melero, asistieron, entre otros, Carmen Franco (hija del dictador) y Blas Piñar (ex dirigente del partido fascista Fuerza Nueva). Al parecer, a la salida de la misa, se cantó el "Cara al Sol" y se vendió "merchandising" con simbología fascista, algo prohibido por la Ley de Memoria Histórica, una de esas leyes que parece ser que si no quieres cumplirla no pasa nada.

¿Acaso esto no puede considerarse apología de la violencia? ¿acaso apología de un terrorismo de Estado vigente durante 40 años? Por menos de esto un tal Otegi está la cárcel. Si enaltecer a un terrorista es delito, lo debe ser para todos. ¿Por qué es ilegal un partido que no condena el terrorismo etarra y no es ilegal un partido que no condena, sino que rinde culto, a una dictadura que en "periodo de paz" es decir, desde que acabó la Guerra, sumó decenas de miles de ejecutados y represalidos?

Mientras, un juez que se propone investigar los crímenes de la dictadura se sentará en el banquillo de los acusados. Si esto hubiera ocurrido con los crímenes de las dictaduras argentina, chilena o incluso de la Alemania nazi, desde España nos rasgaríamos las vestiduras diciendo que se protege a los criminales. Aquí parece que también hubo una "Ley de Punto Final" y se llamó "Transición": hasta aquí hemos llegado, no investiguéis nuestros crímenes, aceptad como Jefe de Estado al sucesor nombrado por Franco y seguiremos estando en la sombra de los poderes fácticos, principalmente el judicial. La persecución de Garzón, entre otras muchas cosas que quizá no salen tanto en los mass media, así lo demuestra.

Volviendo al tema de la misa por "los que acabaron con los enemigos de Dios" y con la Iglesia Católica en general, cabe decir que encima tenemos que aguantar el ver a un Gobierno, que se autodenomina "socialista", que continuamente amaga (de palabra) con acabar con los privilegios de la Iglesia Católica en España. Cada cierto tiempo cuando surge algún conflicto entre Estado e Iglesia, desde el PSOE se "amenaza" con cortar la financiación de la Iglesia. Es como decir: "cállate, que te estoy pagando". Parece que se compra el silencio. Además la gente de la calle, los afines al gobierno, suelen decir que "hay que dejar de financiar a la Iglesia, a qué se mete la Iglesia a opinar de asuntos que son competencia de las administraciones públicas". Mi punto de vista es el siguiente: cualquier persona o Institución puede emitir su opinión. La Iglesia también. Y puede hablar en nombre de sus "afiliados". Otra cosa es que haya que hacerles caso.

La cuestión es que debe dar igual si la Iglesia está a favor o en contra de las tesis del Gobierno de turno, la cuestión es que en un Estado laico (como se supone que es el español), las distintas confesiones tienen que autofinanciarse, sean católica, musulmana, hindú o la iglesia maradoniana... El Estado no debe hacer populismo barato cuando le conviene amenazando con revisar el Concordato con la Santa Sede.

Un argumento de los defensores de mantener los privilegios económicos de la Iglesia (financianción desde los Presupuestos Generales del Estado, casilla específica en las declaraciones de Hacienda, deducciones impositivas, etc) es que realizan muchas obras sociales. Obvio, es la Institución que más ayuda presta a determinados colectivos (mayores, inmigrantes, personas con escasos recursos, etc), pero hay que tener en cuenta que estas ayudas las paga la Iglesia con subvenciones que llegan por otra vía: ayudas y subvenciones a las que se presenta la Iglesia (muchas veces a través de Cáritas, Manos Unidas, Mensajeros de la Paz...) en supuesta igualdad de condiciones que otras ONG´s laicas como Cruz Roja, Intermond Oxfam, etc. Por lo tanto podemos decir que la labor social que desarrolla la Iglesia no lo hace gracias a los privilegios del Estado vía Concordato con la Santa Sede, sino con subvenciones específicas para proyectos específicos, que también podrían realizar otras ONG´s.

Mientras tanto La Legión (empleados públicos del Estado) sigue desfilando en Semana Santa con su Cristo de la Buena Muerte, el Ejército, la Guardia Civil y la Policía (empleados públicos) también desfilan en estos actos religiosos. ¿lo hacen en horas de trabajo o en sus horas libres? Si lo hacen en sus horas libres: ¿por qué llevan los uniformes? Altos representantes de las Instituciones (alcaldes, presidentes de diputaciones y de Comunidades Autónomas) también desfilan. Las cruces siguen en los colegios y en hospitales. Los cargos públicos juran su cargo sobre la Constitución (lógico y normal) y frente a un crucifijo...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Y los crimenes ocurridos durantela Republica, quema de Iglesias y aesinato de curas e inocentes...de esos no hablas

caos-emergente.blogspot dijo...

La quema de iglesias durante la República, fue eso: durante la República. Es decir no realizada por la República. Los autores fueron elementos incontrolados. Culpar al Gobierno republicano de estos hechos, es como culpar a los Gobiernos actuales de la delincuencia común, el tráfico de drogas o el terrorismo.
Los autores fueron, en su mayoría, anarquistas, que no tenían nada que ver con las autoridades republicanas.
Además, los autores acabaron muertos en la guerra, fusilados o encacelados. Mientras que los fascistas (y la Iglesia) nunca pagaron por sus crímenes, ni durante la guerra ni durante los 40 años siguientes. Es más, la Iglesia disfruta de amplilos privilegios fiscales